Desde el inicio de la campaña informativa del Dr. Rath, el 21 de enero de 2021, donde da a conocer a los Jefes de Estado de los principales países sobre el papel estratégico de los micronutrientes en la lucha contra la pandemia del coronavirus, el mundo ha sido testigo de acontecimientos que antes eran impensables. No pretendemos que exista una relación causal entre la llegada de esta importante información a los líderes políticos y los acontecimientos que se documentan a continuación. Sin embargo, existe una conexión temporal evidente. A principios de año, el mundo entero contenía la respiración ante la explosión de las mutaciones del coronavirus; prácticamente todos los países han alertado a sus ciudadanos sobre confinamientos y restricciones de los derechos civiles, que se prevé que duren más allá de la Semana Santa y hasta principios del verano de este año. Teniendo en cuenta estos hechos, los acontecimientos que se documentan a continuación difícilmente pueden explicarse de otra manera que no sea como una respuesta a los mensajes clave del Dr. Rath:
- Las vacunas ya no son la única protección contra la pandemia del coronavirus.
- Los políticos que continúan haciendo tales afirmaciones sin fundamento se están exponiendo a responsabilidades legales y económicas sin precedentes.
A partir de ahora, el mundo político se dividirá en dos fracciones:
- Por un lado, estará la fracción «acérrima» de los políticos que representan a los países exportadores de productos farmacéuticos, que seguirán llevando a su propia población a un frenesí de nuevos confinamientos con el objetivo de asustar también a la población de otras naciones y hacer que acepten la estrategia global de «sólo vacunas» de estos países exportadores de fármacos.
- Por otro lado, estarán los políticos que se preocupan ante todo por el bienestar físico, económico y social de su pueblo. Estas «voces de la razón» se verán alentadas por la siguiente documentación